Resumen
El dopaje en el deporte es un flagelo que ha afectado la práctica deportiva desde los tiempos de los Juegos Olímpicos de la Antigüedad. En los tiempos modernos, sin embargo, el dopaje en el deporte ha asumido una escala epidémica que involucra no solo a atletas de alto rendimiento, sino también a deportistas en edad escolar que quieren ser las estrellas del mañana, y se ha convertido en una amenaza para la salud pública en general. Numerosas causas han conllevado a la expansión de las prácticas dopantes en el ámbito deportivo: la creciente comercialización del deporte; el desarrollo vertiginoso de las ciencias químicas, farmacéuticas y biotecnológicas que han conllevado a la producción y disponibilidad de numerosas sustancias diseñadas en un principio con objetivos terapéuticos pero que también pueden ser usadas (o abusadas) para aumentar el rendimiento deportivo (agentes anabólicos “de diseño”, hormonas recombinantes, nuevos estimulantes, etc.); la exploración continua de nuevas estrategias y métodos para mejorar los resultados de los atletas; el desarrollo de un mercado ilícito y de redes de tráfico de sustancias dopantes estimulado por ingentes beneficios económicos en combinación con riesgos legales “aceptables” dado que en muchos países las legislaciones nacionales antidopaje son aun débiles y este fenómeno es interpretado como una responsabilidad de las autoridades deportivas solamente.